Soy inmigrante y estoy embarazada en Estados Unidos
Uno de los terrores más latentes en las extranjeras en proceso de gestación, lactancia y en periodo de posparto es ser separadas de sus hijos tras la implementación de la nueva política establecida en el mandato de Trump. Esto a consecuencia de que con esta política muchas madres fueron deportadas del país.
¿Cuál es la restricción para las mujeres embarazadas en Estado Unidos?
Durante el gobierno de Trump en enero del 2020, el Departamento de Estados Unidos en las oficinas de Asuntos Consulares emitió unas normas y con ella salieron de rigor todos los derechos ayudas, por lo que generaron un gran revuelo en las inmigrantes en estado de gestación. Todo esto debido a que estas normas establecen el rechazo de la solicitud de las visas B-1 y B-2.
Esta decisión fue tomada por el flujo de mujeres que ingresaban estando embarazadas únicamente para dar a luz dentro del país y así poder obtener la nacionalidad por derecho de nacimiento gracias a su descendencia. Además de que muchas de estas mujeres ingresaban al país con una visa de turismo, pero con fines de 'turismo de parto' como vulgarmente se le conoce.
A raíz de esta problemática se implementó la ley y muchas aerolíneas restablecieron las políticas en sus controles de seguridad para restringir los viajes de mujeres en etapa de embarazo. Estas aerolíneas colocaron un límite para viajar hasta las 36 semanas de embarazo y el regreso era establecido antes de la fecha de parto para así controlar estas situaciones.
Debido a esto, las aerolíneas, entres los documentos exigidos, hacen una revisión médica para las mujeres visiblemente embarazadas para establecer en el pasaje la fecha de regreso antes de la del parto. Estas aerolíneas se sumaron a esta normativa porque empezaron a presentar pérdida al costear el regreso de estas mujeres cuando se les negaba el ingreso al país.
Afortunadamente, con el nuevo gobierno de Joe Biden, esta ley salió de circulación y no detendrá a ninguna inmigrante embarazada ni la privará de compartir con su hijo. Sin embargo, estableció nuevas normativas para disminuir el flujo de este tipo de inmigrante en el país.
Ley de inmigración en Estados Unidos para las embarazadas
En las leyes de inmigración establecidas en Estados Unidos se considera el proceso de gestación igual que una enfermedad. Por tal motivo, antes de entrar al país, las mujeres embarazadas tienen que probar que cuentan con los recursos necesarios y suficientes para costear cualquier problema que se pueda presentar.
Sin embargo, al entrar en vigor la ley establecida por el presidente Trump se restringieron las entradas al país de las mujeres embarazadas. El objetivo principal de esta ley era evitar una práctica que se había vuelto costumbre para que los recién nacidos puedan poseer la nacionalidad automáticamente después de su nacimiento.
Esta nueva ley no afecta a las extranjeras que se encuentran en proceso de solicitud de la residencia permanente o mejor conocida como la green card y tarjeta verde, al igual que no tiene repercusión para los visados de tipo H-1B,F-1 y M-1. Así como también están exentas todas las migrantes que ingresen al país con cualquier otro tipo de visado.
Sin embargo, en casos particulares esta ley tiene excepciones, por ejemplo, para aquellas extranjeras que visitan el país estando embarazadas para realizarse algún tipo de tratamiento médico. Por tal motivo, estas extranjeras tienen que presentar los documentos médicos requeridos para poder obtener el visado B-1.
Para que esto sea posible, la solicitante tiene que demostrar que el médico estadounidense estableció una cita y los oficiales de inmigración estudian minuciosamente cada caso. Así como, acreditar que tiene los fondos suficientes para costearse y saldrá del país antes del parto.